La casa rural combina el característico encanto de una casita rural con el equipamiento de un hotel de cinco estrellas.
La casa está situada en Fermoselle, un bello y particular pueblo construido sobre peñascos y despeñaderos. La villa, famosa por sus vinos y su aceite de oliva, es considerada por muchos como la capital de los Arribes del Duero.
Por si la belleza, la gastronomía, y la naturaleza no fueran suficiente, Fermoselle fue declarado conjunto histórico-artístico en el año 1974 gracias a algunas de sus antiguas construcciones, como la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, en la que se pueden apreciar elementos tanto románicos como góticos.
Acogedora casa rural de estilo tradicional.
Ofrece senderismo, fauna y paseos en barco.
Rodeada por el paisaje de los Arribes del Duero.
El parque natural Arribes del Duero está protagonizado por 120 km de río custodiado a ambos lados por inmensos macizos rocosos. Este impresionante paisaje puede ser disfrutado desde sus pacíficos miradores, haciendo senderismo o hasta desde el propio río en una travesía en crucero.
Cuenta con televisión, sofá-cama, una extensa mesa y un baño básico. Si necesitas otra habitación, el salón hará esa labor sin problemas.
Tendrás a tu disposición una cocina de vitro. La estancia también está equipada con microondas, nevera y cafetera.
Dos habitaciones equipadas con cama de matrimonio, amueblado básico, terraza, televisión de última generación con Smart TV y baño propio con jacuzzi.
Tres baños. Los de las habitaciones tienen enormes jacuzzis de 400 litros donde descansar y relajarse tras el viaje. El baño del salón cuenta con lo básico.
La casa rural combina el encanto de una construcción rural tradicional con la tranquilidad de los paisajes de los Arribes del Duero.
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